Situación de los servicios financieros digitales, la seguridad de la información y ciberseguridad en el Sector Financiero Popular y Solidario

Resumen

El mundo experimenta una transformación digital acelerada, con ritmos de adaptación que difieren entre regiones por la existencia de brechas digitales entre países y al interior de las economías. La pandemia ocasionada por el COVID-19 acentúa estas brechas, con especial afectación en grupos vulnerables, de bajos ingresos o ubicados en zonas rurales, siendo un desafío enorme el evitar el deterioro de los niveles de inclusión financiera.

En el Ecuador, el acceso a los servicios financieros básicos sigue siendo insuficiente, una posible solución a este problema es la inclusión financiera digital. Es decir, poner los medios digitales al servicio de las poblaciones económicas excluidas y desatendidas, adaptando los servicios financieros a sus necesidades.

La inclusión financiera digital permite abordar dos problemas fundamentales: los elevados costos operacionales y la falta de servicios personalizados.  A través del uso de nuevas tecnologías se puede llegar a más usuarios, permitiendo que las familias mejoren su calidad de vida al tener acceso a productos financieros, logrando así planificar, iniciar, o ampliar negocios, logrando invertir en educación, gestionar riesgos e incluso ahorrar.

De igual manera, la implementación de servicios financieros digitales permite a las entidades, reducir costos de procesos, optimizar el uso de espacios físicos, disminuir tiempos administrativos y alcanzar zonas remotas, lo que anteriormente no se consideraba posible.

Entre los desafíos que enfrenta el Sector Financiero Popular y Solidario en torno al uso de los servicios financieros digitales se encuentran: el equilibrio entre seguridad y experiencia del usuario, la importancia de la protección de los datos personales y la privacidad, así como el establecimiento de normativa y directrices claras y estables que permitan una implementación adecuada y el impulso de ecosistemas Fintech dinámicos con cambios tecnológicos disruptivos.

La transformación digital más que una expectativa es una realidad y su  ritmo acelerado conlleva varios desafíos para las economías. Una mayor oferta de servicios digitales implica  una creciente  exposición a ciberataques, convirtiéndose en una prioridad para las entidades del sector financiero popular y solidario, el contar con mecanismos que permitan proteger los datos frente a amenazas, y generar así confianza por parte de los socios y clientes.

En este contexto, es relevante analizar  la situación de los servicios financieros digitales en el sector financiero popular y solidario, así como los aspectos relacionados con la seguridad de la información y la ciberseguridad. Es por ello que la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria realizó dos encuestas de levantamiento de información a las  entidades del Sector Financiero Popular y Solidario, específicamente sobre: a) servicios financieros digitales; y b) estado actual de Seguridad de la Información y Ciberseguridad. Entre los principales hallazgos destacan son: 1) la oferta de servicios financieros en el Sector Financiero Popular y Solidaria prioriza la atención física; 2) existe una baja asignación presupuestaria para tecnología e innovación; 3) aproximadamente 20% de los socios demandan los servicios y productos financieros de manera digital; 4) existe una marcada diferencia entre segmentos en cuanto al estado de transformación digital y, 5) las entidades no tienen mayor relación con el desarrollo de iniciativas Fintech.

A partir de los resultados obtenidos, se presentan una serie de recomendaciones resumidas a continuación: a) fortalecer los programas de educación financiera especializada, para oferentes y demandantes de servicios financieros, y  b) generar fuentes de financiamiento para creación de nuevos servicios financieros digitales, seguridad de la información, prevención de ciberataques y capacitación.